Después de todo lo que llevamos vivido desde 2020, no queda otra opción que darle un empujón a la espiritualidad, para que cada vez más y más humanos inicien el camino al autoconocimiento y descubran por fin que son seres espirituales eternos viviendo experiencias en el plano físico. Esto que se dice muy rápido y que para muchos humanos ya es una creencia, en realidad puede tardar mucho tiempo en convertirse en certeza, que es lo que realmente nos transforma en nuestro interior. No es mismo leerse un libro, acudir a una conferencia o charlar con tu profesor de yoga que vivirlo por ti mismo. Algunas personas viven experiencias cercanas a la muerte, otros tienen cierta habilidad para desdoblarse y puede que con muy poco entrenamiento ya sepan que somos mucho más que carne y hueso. Pero no es necesario esperar eternamente para llegar a esa convicción. Nosotros mismos podemos iniciar ese viaje, tengamos o no traumas que vengan del pasado. Por todo ello me decidí dar un paso más en mi trabajo de divulgación y dar la cara para contar todo lo que sé.
Uno de mis mayores deseos cuando empecé a crear blogs y publicar libros era que se pudiera hablar con total naturalidad de tus vidas pasadas con gente normal. Creo que si nosotros mismos no damos ejemplo y no damos el primer paso, este conocimiento tan valioso tardará mucho más tiempo en llegar a aquellos que lo necesitan. Y en este momento tan crucial en la historia de la humanidad, lo necesitamos todos.
A pesar de la hora y media de entrevista, no pudimos profundizar todo lo que me hubiese gustado en algunos aspectos de mi experiencia, pero como introducción para aquellos que no me conozcan creo que está genial. Es un pequeño resumen de lo que cuento en los primeros capítulos de mi libro La caja de Pandora, disponible desde hace unos años. En ese libro el lector no solo conocerá con todo detalle por qué y cómo empecé a recordar vidas pasadas, sino que también encontrará muchos consejos prácticos para iniciar su propio viaje. El mensaje final que siempre deseo dar es uno muy simple: si yo pude recordar vidas pasadas, verificar algunas de ellas, y llegar a la conclusión de que la reencarnación es un hecho, tú también puedes. La muerte no existe y todos volvemos una y otra vez a reencontrarnos con nuestros seres queridos. Por mucho daño que alguien nos haga en una vida o por mucho daño que hayamos hecho nosotros, siempre existe la posibilidad de repararlo y de avanzar en nuestro camino.
La seguridad de que somos seres espirituales inmortales nos da una fuerza indescriptible para seguir luchando por el bien, estemos encarnados o no. Pero es necesario tener esa seguridad, esa certeza. Ya no es suficiente con tener creencias. Ha llegado la hora de vivirlo, ha llegado la hora de saber.
Espero que disfrutes de la entrevista (a pesar de los problemillas técnicos con el sonido), y si te gusta, te agradecería que la compartas, para que alcance a todas aquellas personas que aún buscan respuestas.