Debido a recientes acontecimientos en el foro que
administro, me vi obligada a hacer una importante aclaración sobre la finalidad
y el contenido de la información que desde hace un tiempo me he propuesto hacer
llegar a los lectores, y creo que no estaría de más hacerla aquí también.
Ya lo he dicho en otros lugares del blog, pero lo repetiré
por si queda alguna duda: este no es un blog espiritual. Es un blog, y por
tanto es altamente personal, lo que vierto aquí son opiniones propias pero en
ningún caso son opiniones hechas a la ligera sin ningún fundamento, sino que
son el fruto de toda una vida de estudio, investigación y, sobre todo en los
dos últimos años, experiencias directamente relacionadas con el recuerdo de
vidas pasadas. Aún no lo sé todo, evidentemente, y cada día sigo aprendiendo de
otros compañeros que llevan mucho más tiempo que yo en esto y que han pensado
lo mismo o más que yo, con sus propias experiencias totalmente distintas a las
mías, que me apoyan en los momentos bajos y que me ayudan a ver con más
claridad cuando me encuentro en un callejón sin salida.
Sin embargo lo poco que sé parece ser mucho para otras
personas que se acercan por primera vez al concepto de la reencarnación y que
lo único que han hecho ha sido leer una serie de mitos mal fundados en
internet, escuchar doctrinas de grupos new age sin pies ni cabeza, o tratar de
comprender enseñanzas ligadas a diferentes religiones y que rayan lo absurdo,
como por ejemplo pensar que nos podemos reencarnar en cucarachas por haber sido malos
en una vida. Cada uno es libre de creer lo que quiera, por supuesto. Pero aquí
damos mucha importancia a la racionalidad y a la seriedad. Ser
reencarnacionista va mucho más allá de “creer” en la reencarnación. Pensamos
que la reencarnación es un hecho porque es lo que mejor explica nuestras
experiencias y porque hemos pasado años leyendo estudios científicos y libros
de calidad, muy alejados de los típicos libros de terapia regresiva que abundan
en las librerías. No es mi caso, pero otras personas han pasado gran parte de
su infancia y adolescencia pensando que algo funcionaba mal en su cabeza, y sin
comprender esos extraños sueños que les hacían despertarse en medio de la noche
con el corazón en un puño, sueños en los que se veían como otra persona
viviendo algo que en apariencia nada tenía que ver con ellas
pero que les afectaba profundamente. Que les pregunten a estas personas si
creer en la reencarnación es un simple deseo de que la muerte no es el fin. Me
gustaría saber qué responderían…
Por fortuna abandoné todo contacto con la religión en la que
fui criada desde muy joven, y fui educada en la ciencia. Me enseñaron a usar la
razón y la lógica. Al mismo tiempo nunca perdí mi afición por los temas
paranormales, y siempre supe que el mundo del misterio es un mundo por el que
hay que caminar con mucho cuidado. Como la reencarnación aún es considerada por
muchos algo “paranormal”, esto también es aplicable a la reencarnación: hay que
aprender a discernir lo que es serio de lo que no, los hechos comprobados de lo
que son simples indicios, hay que aprender a diferenciar lo que es una creencia
de lo que es una posible realidad, respaldada por hechos objetivos. Es muy
importante, estés donde estés, aplicar siempre la lógica, el sentido común, y
un máximo de objetividad, entre otras cosas para no dejarte engañar por
charlatanes ni dejarte convencer sobre "teorías" que aun siendo
elaboradas por científicos, siguen siendo eso, teorías.
En definitiva, tenemos que andar siempre con un gran ojo
crítico, analizando muy bien toda la información que cae en nuestras manos, todos
los casos de supuesta reencarnación que vemos en la red. No podemos ver la
fotografía de un personaje famoso al lado de una fotografía antigua de alguien
que se le parece mucho, y tragarnos sin más que eso es un posible caso de
reencarnación, porque, no, no lo es. Los reencarnacionistas no estamos locos ni
creemos en cualquier cosa. Al contrario, nos tomamos muy en serio la
reencarnación, y si vemos que alguien nos intenta engañar o pretende burlarse
de nosotros, nos vamos a defender con buenos argumentos. Sabemos de lo que
hablamos y por eso más vale que sepas a quién te vas a enfrentar antes de meterte
con nosotros. Puede parecer que estamos obsesionados o que a veces somos un
poco radicales. No, lo único que ocurre es que se ha convertido en algo muy
personal, porque no nos ha sido nada fácil llegar hasta aquí.
Es una ardua lucha que acaba de comenzar: la de traer algo
de racionalidad y sentido común a un fenómeno tan importante como es la
reencarnación y que sin embargo goza de tan poca credibilidad en general por
culpa de las habladurías de muchas personas que ni siquiera saben lo que
significa recordar vidas pasadas. Recordar de verdad, no en un salón de actos
atiborrado de gente, en un taller de una hora de “maravillosa regresión
espiritual para la sanación de tu alma en la que conocerás a tus guías espirituales”.
No, yo me refiero a pasarte una vida lidiando con emociones, síndrome de estrés
postraumático, ansiedad, sueños recurrentes, prejuicios, hechos históricos
distorsionados, incomprensión... y conviviendo con un silencio que te ves
obligado a adoptar para que no te tomen por desequilibrado. Eso es recordar
vidas pasadas. Y de eso es de lo que hablamos en este blog y en Foro Reencarnación. Ni más ni menos.
es una carga que llevamos todos encima pero que solo unos cuantos la experimentan.
ResponderEliminarQue lindo sería que fuese como en el caso de la foto, seríamos todos como vampiros.
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